Ya sabrás por los posts anteriores lo importante que es elegir una actividad que te motive, un buen instructor y entrenar en grupos reducidos.
LOS ESTUDIOS PILATES SON SITIOS ESPECIALES, no sólo por sus instructores especializados si no también por sus herramientas de trabajo.
En las clases de grupo de Pilates mat, (en castellano colchoneta), encontrarás colchonetas, pelotas grandes, bandas elásticas, aros, disco giratorios e incluso pesas en forma de pelotas. Todos estos accesorios harán que la sesión no tenga nada que envidiar a una sesión con máquinas.
En un estudio donde se trabaja con las máquinas encontraremos primero de todo las dos principales; el Cadillac y el Reformer.
Pilates las diseñó con ayuda de su hermano (que trabajaba el hierro y la madera) para mejorar la salud de todos sus clientes. Tanto los lesionados y aquejados de dolores, como los atletas y bailarines que había en el mismo edificio en el que situó su centro.
El cadillac, ese aparato que a primera vista tiene aspecto de cama de tortura, es perfecto para trabajar con gente con poca movilidad, muchos ejercicios se pueden hacer cómodamente tumbados y sentados. Pilates era tan ingenioso que también los más avanzados pueden trabajar con el Trapezio (el otro nombre que recibe el Cadillac) y colgarse de sus hierros y hacer ejercicios de lo más acrobáticos.
El reformer es un aparato muy versátil y la estrella del centro, resulta divertido y dinámico. El favorito de todos, la plataforma se mueve y permite trabajar con más consciencia al hacer un tipo de contracción muscular (de la que hablaremos en próximos post) que es la responsable de los músculos largos de los bailarines y que aporta flexibilidad y por lo tanto amplitud de movimiento a los músculos.
Además podemos encontrar el spine corrector, y la wonda chair que complementan a estos dos colosos.
Siempre hay accesorios, como la Wall Unit, o una torre que se ajusta al Reformer para hacer un combinado de Reformer y Cadillac. Y ahora hasta tenemos una cama elástica para hacer cardio.
En mi pequeño estudio del Raval, en Barcelona, donde trabajo con el cliente de uno en uno, podéis ver el reformer y el cadillac, los elegí en tapicería blanca para restarle ese aspecto de cámara de tortura, y he incluido una poderosa herramienta. Una pieza para mi imprescindible y clave: los ESPEJOS.
El Método Pilates incide mucho en la correción postural. Con las simples palabras del instructor, sin un lugar donde mirarte, la postura se corrige muy lentamente.
Como bailarina sé que es muy importante la luz de la consciencia, en el momento que te ves, ya sólo se trata de corregirte una y otra vez cada vez que prácticas ese ejercicio. Pero si no te ves...no cambias nada, porque no hay nada que cambiar.
Con el espejo en el techo, al principio los clientes se sienten perdidos, la derecha parece la izquierda en el espejo, pero después de dos sesiones ya se han acostumbrado y la eficacia de sus movimientos ha mejorado un 100% porque pueden ver lo que hacen. Ellos lo notan y confiesan que con el espejo trabajan más duro y avanzan más rápido.
Bienvenidos al Mundo PILATES, un lugar donde progresar de verdad.
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